El puntero láser es quizás uno de los juegos más atractivos para nuestros gatos.
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De hecho, no hay que hacer tanto esfuerzo para que ellos jueguen con nosotros ya que basta con encenderlo para que ellos corran a perseguir el punto de luz.
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Sin embargo, esta entretención, tan de moda en Internet y redes sociales, puede llegar a generarles estrés y frustración puesto que nunca pueden atrapar el punto brillante.
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La caza es una de las conductas más conectada con su herencia salvaje y en el mundo natural ellos consiguen un refuerzo que nunca van a poder obtener con el uso del puntero láser: el placer de conseguir su presa o verla que se les escapa.
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Por este mismo motivo, si decidimos jugar con este elemento estamos provocando en ellos frustración y en casos más graves, llegar a crear una conducta compulsiva en el gato que imagina luces y sombras por la casa generando una ansiedad crónica.
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Eso sin adicionarle que el láser tiene otras consecuencias que afectan a su salud y a la nuestra como, por ejemplo, cambios de comportamiento, daños en la retina y accidentes domésticos.
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Por eso, nuestra recomendación es evitar este método de juego, privilegiando objetos reales que él pueda atrapar y terminar todo ese proceso con un premio.
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😺¿Lo sabías?